El incendio de la Cumbre ha sucedido justo después de liberar 9 pinzones criados en cautividad y 15 pinzones traslocados desde los pinares de Inagua, zona en donde se encuentra su población fuente.

Durante los primeros días en los que se ha podido realizar el seguimiento para comprobar el estado de los pinzones recién liberados, se ha observado que la mayoría de los ejemplares no han sufrido un efecto directo del incendio.

Si bien es cierto que una parte importante del hábitat del pinzón azul en la Cumbre se salvó de las llamas, todavía no disponemos de datos precisos de la superficie afectada. Los mayores daños se han producido en uno de los corredores ecológicos que está previsto crear con el proyecto Life+Pinzón, desde el Cortijo de Huertas hasta Cruz de Tejeda, donde se han quemado las parcelas que se habían repoblado durante el 2016-2017 en parte con ayuda de voluntarios.